La XVI Copa
Mundial de la FIFA fue la mayor de la
historia: en ella participaron 32 equipos que disputaron 64 encuentros. Los
ocho grupos, de cuatro selecciones cada uno, fueron repartidos por toda
Francia, entre los diez estadios nuevos o remodelados. El partido inaugural y
la final se disputaron en el espléndido Estadio de Francia, de reciente
construcción, situado en Saint-Denis, al norte de París.
Como suele
ocurrir en la Copa Mundial de la FIFA, la primera ronda deparó no pocas
sorpresas. Algunos de los favoritos tuvieron que dejar paso a conjuntos por
cuya clasificación nadie habría apostado en un principio. España, tras un mal
comienzo y a pesar de despedirse con la cabeza bien alta, no consiguió acabar
con su mal fario en la Copa Mundial de la FIFA. Cuando lo tenía todo en contra,
tras caer por 3-2 ante Nigeria en su primer partido, el equipo de Javier
Clemente logró hacerle seis goles a una desventurada Bulgaria, pero finalmente
fue Paraguay, tras su victoria sobre las "águilas verdes", que
lideraban el grupo, quien consiguió clasificarse, dejando fuera a España.
Colombia
también se quedó en la primera fase, en un grupo encabezado por una selección
rumana que dio la sorpresa al imponerse a Inglaterra por 2-1. Escocia y Jamaica
tuvieron que inclinarse en sus grupos de clasificación ante Brasil y Argentina,
respectivamente, pero sus hinchadas aprovecharon las dos primeras semanas de
competición para repartir efusión y alegría por toda Francia. Marruecos también
se marchó del torneo con cierta amargura, ya que un penal en el último minuto
permitió a Noruega derrotar a la todopoderosa Brasil y arrebatar la segunda
plaza del grupo al combinado magrebí.
El encuentro
más memorable de octavos de final fue el disputado en Saint-Etienne entre
Inglaterra y Argentina. La primera mitad pasará a los anales del deporte como
45 minutos de fútbol clásico: un penal para cada equipo en los diez primeros
minutos; el golazo de Michael Owen, que adelantó a los "tres leones";
y el golpe franco transformado con precisión milimétrica por Javier Zanetti,
que empató el partido al borde del descanso. Tras la reanudación, los goles se
vieron reemplazados por momentos dramáticos: David Beckham fue expulsado por
dar una patada a Diego Simeone, el árbitro anuló a Sol Campbell el tanto que
hubiera supuesto el triunfo inglés, por falta sobre el portero, prórroga,
penales, etc. Carlos Roa le paró a David Batty el quinto y último lanzamiento
de Inglaterra, clasificando así a la "albiceleste" para la final.
Por su
parte, Francia, la nación anfitriona, avanzaba con paso lento pero seguro hacia
su cita con el destino. Tras hacer pleno en la fase de liguilla, encontró una
encarnizada resistencia ante Paraguay y necesitó para clasificarse el primer (y
hasta ahora único) gol de oro de la historia de la Copa Mundial de la FIFA,
logrado por el defensa central Laurent Blanc en el minuto 113. Italia fue su
siguiente rival, y esta vez fueron los postes los que vinieron a su rescate.
Roberto Baggio cabeceó fuera un balón cuando estaba sin marca en los últimos
minutos de la prórroga y Luigi di Biagio envió al larguero el quinto y decisivo
lanzamiento de la tanda de penales.
En
semifinales, el país anfitrión se cruzó con la revelación del campeonato:
Croacia. En su primera Copa Mundial de la FIFA tras la división de la ex
Yugoslavia en varios estados independientes, los héroes de camiseta a cuadros
de Miroslav Blazevic arrollaron a Alemania con un 3-0 en cuartos de final y,
más adelante, dejaron de piedra a la afición local cuando Davor Suker, ganador
de la bota de oro, adelantó a su equipo ante Francia después del descanso.
Surgió entonces la figura; el lateral derecho Lilian Thuram eligió ese preciso
momento para marcar su dos primeros goles como internacional y preparó una
final de ensueño: Francia, el país organizador, contra Brasil, vigente
campeona, que se había impuesto a Chile, Dinamarca y Holanda en las
eliminatorias.
Así fue
como, el 12 de julio, "llegó el día de la gloria", si tomamos
prestada una línea de La Marsellesa, el himno nacional francés. Con un gol de
cabeza en el minuto 27 y otro en el tiempo añadido de la primera mitad, el
mediapunta Zinedine Zidane asestó a sus rivales brasileños dos golpes de los
que ya no se recuperarían. A pesar de quedarse con diez hombres tras la
expulsión de Marcel Desailly en el minuto 68, la fortaleza francesa no sólo
resistió la acometida final de Brasil, sino que incluso marcó otro tanto, tras
un contragolpe de Emmanuel Petit en el último minuto. El pitido final del
colegiado marroquí Belqola, el primer africano que arbitraba una final de la
Copa Mundial de la FIFA, fue la señal para que todo el país diera rienda suelta
a un éxtasis de júbilo. Tan sólo en los Campos Elíseos se dieron cita más de un
millón de personas, que celebraron el triunfo bailando toda la noche.
Resumen de
datos
Equipos: 32
Cuándo: 10
junio 1998 hasta 12 julio 1998
Final: 12
julio 1998
Partidos: 64
Goles: 171
(promedio de 2.7 por partido)
Asistencia:
2785100 (promedio de 43517)
Ganador:
Francia
Segundo:
Brasil
Tercero:
Croacia
Cuarto:
Países Bajos
Balón de Oro
de adidas: RONALDO (BRA)
Bota de Oro
de adidas: Davor SUKER (CRO)
Premio
Yashin para el Mejor Portero: Fabien BARTHEZ (FRA)
Mejor
Jugador Joven: Michael OWEN (ENG)
Premio Fair
Play de la FIFA: Inglaterra, Francia
Premio FIFA
para el equipo más atractivo: Francia
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