Edwin Oviedo juraba como nuevo presidente de la FPF y Manuel
Burga, en sus palabras de despedida, dio un discurso poco autocrítico y con
mucha molestia frente la prensa deportiva. Al parecer, no soportó las críticas
fundamentadas que los periodistas le hicieron durante sus doce años al mando de
la federación.
"Vamos a ver si otorongo periodista come a otorongo
periodista o si hay silencio cómplice como hasta hoy. Esa es nuestra prensa.
Hoy perdida entre la más noble de las profesiones y el más vil de los
oficios", dijo Manuel Burga tras denunciar que el periodismo no publicó
toda la verdad sobre su gestión de 12 años que, en resumen, tuvo tres fracasos
en Eliminatorias mundialistas y dos vergonzosas huelgas en el fútbol peruano.
Luego agregó sobre el periodismo: "Quien en muchas
oportunidades manipula y se escuda en la concertación. No informan todo, solo
lo que quieren que se sepa", atacó Manuel Burga de forma directa.
"Tengo una certeza que por lo menos habrá una sanción
moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición", dijo Manuel
Burga luego de haber lanzado ataques directos contra el periodismo.
Entre lo más rescatable sobre el fútbol en su discurso,
Manuel Burga dijo: "No piensen en más jugadores extranjeros. Piensen y den
cabida a más jugadores peruanos jóvenes. Háganlo por convicción y no por
reacción".
Manuel Burga saludó también en su discurso de manera
especial a Sergio Markarián, de quien dijo "que no tiene duda que el
tiempo valorará su trabajo en el Perú". De Pablo Bengoechea dijo que
"asumió un difícil reto con la mejor disposición".
El adiós de Burga: "Ahora me despido con una
vieja frase:
'Los viejos soldados nunca mueren, solo se desvanecen'.
Y como los
viejos soldados de la balada, cierro mi carrera en el fútbol profesional y
simplemente me desvanezco, un soldado que tan solo intentó cumplir con su deber como
Dios se lo dio a entender".
Fuente: El Comercio Deporte Total
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