Tres partidos consecutivos sin conocer la victoria, han
puesto a Melgar al borde del fracaso. El empate de visita (0-0) ante Alianza
Lima, la paridad de local (0-0) contra Municipal y la derrota (0-1) en Trujillo
a manos de Cesar Vallejo, han contribuido a que el dominó pierda el liderato de
la tabla del Acumulado y quede relegado al cuarto puesto en el Torneo Clausura.
Sin embargo, lo positivo es que pese al complicado panorama,
los rojinegros aún dependen de sí mismos para clasificar a las Semifinales del
Descentralizado. El martes (3.30 p.m.-estadio “Alberto Gallardo”) no les
quedará otra opción que derrotar a Cristal para seguir en carrera, de lo
contrario estarán en “cuidados intensivos”.
Muchos son los argumentos que pueden explicar el bajón
futbolístico del equipo de un Juan Reynoso que una vez más ha dejado en claro
que bajo cualquier circunstancia morirá en su ley, esa filosofía
incomprensible, especialmente cuando tiene que afrontar los compromisos fuera
de suelo arequipeño.
El no asumir su condición de candidato al título en partidos
claves, una vez más le pasa factura a Melgar. El traspié ante Vallejo es un
claro ejemplo de ese aparente conformismo, diametralmente opuesto a una
propuesta futbolística y un material humano como para buscar los tres puntos de
visita; pero que terminan desbaratados tras imponerse el pensamiento Reynoso.
Ante Cristal será una final adelantada, un duelo en el que
ambos equipos pondrán toda la “carne al asador”. Los rimenses aspiran “matar
dos palomas de un solo tiro”: dejar fuera de carrera a Melgar, ganar el
Clausura y por ende, acceder de forma directa a la final. Por supuesto a la
espera de un traspié del actual puntero, Sport Huancayo.
Por su parte, los melgarianos no tendrán otra alternativa
que lograr el triunfo para recuperar el primer puesto del Acumulado y
consolidar su clasificación en la última jornada a costa de Juan Aurich, al que
enfrentarán en Arequipa. A estas alturas, pensar ser los mejores del Clausura
pasa a segundo plano, aunque si se obtiene será bienvenido.
Ese es el presente, esa es la complicada realidad que hace
dos jornadas pintaba de la mejor manera para Melgar, que ha cedido puntos de
local y aunque suene extraño, puntos de visita que podría tener un triste
desenlace, en una clasificación a una Copa Sudamericana que tendría sabor a
poco, que tendría sabor a fracaso.
Fuente: Melodía En Los Deportes
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